Dos Grandes de nuestra cultura nos han dejando, Venancio Blanco y Antonio Fraguas "Forges". Cada uno a su estilo, cada uno ofreciendo con su trabajo la esencia de sus vidas, su visión personal transmitida a través de sus obras. El Uno, enseñando a través de sus esculturas y de sus enseñanzas a tantos y tantos alumnos su visión personal de la vida. El Otro, su ironía, su crítica a una sociedad mal enseñada, mal conducida y que mal aprende. El ARTE propio, personal, inigualable, de los dos.
Descansen en paz, Maestros.
